Tensión por la construcción del muro entre San Isidro y San Fernando
La construcción de un polémico muro entre los municipios de San Fernando y San Isidro hizo estallar la bronca de los vecinos. Ayer por la mañana, un centenar de habitantes de Villa Jardín que se habían reunido en la avenida Uruguay, límite entre ambos partidos, para manifestar su rechazo a la medida, comenzaron a derribar los pilotes que habían sido colocados por orden del intendente Gustavo Posse.
La tensión aumentó cuando algunos vecinos protagonizaron empujones con efectivos de la Guardia de Infantería de la Policía bonaerense que custodiaban el lugar. De todos modos, la situación fue controlada rápidamente y no pasó a mayores.
"Hay que construir más ciudad, en vez de dividir", se quejó el intendente de San Fernando, quien advirtió que el muro no sólo no servirá para mejorar la seguridad entre ambos partidos sino que –por el contrario- aumentará la inseguridad vial.
Gerardo Amieiro, intendente de San Fernando, dijo que participó de un acto con su par, Gustavo Posse y que en el encuentro el intendente de San Isidro nunca le mencionó su intención de levantar el polémico muro.
En la misma línea se expresó el secretario de Planificación de San Fernando, Diego Rossi, al considerar que la medida "no resiste la dignidad de los vecinos" porque la construcción de la división "les afecta la calidad de vida".
Rossi opinó que el cerramiento "no resolverá los problemas de seguridad" porque estos se solucionan "con prevención e inclusión social". Por ello confirmó que la Municipalidad de San Fernando presentará un amparo ante la justicia para frenar la medida.
La iniciativa no sólo es resistida en San Fernando, donde ayer hubo una manifestación en contra. También generó un fuerte rechazo entre las autoridades provinciales. El gobernador bonaerense, Daniel Scioli rechazó el paredón que el municipio de San Isidro está levantando en el límite con el distrito de San Fernando para combatir el delito. Indicó que la medida adoptada por el intendente Posse es "un error" y afirmó que el jefe comunal tendrá que "repensar" esa idea.
Con la idea de favorecer la seguridad en el barrio de La Horqueta, la Municipalidad de San Isidro empezó la obra para limitar el ingreso al barrio por la calle Uruguay, que limita con San Fernando. El cerramiento -será de canteros de hormigón y un alambrado- tendrá 1.600 metros entre Blanco Encalada y Panamericana. Y dejarán liberados por completo tres cruces.
(DyN)
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