Arjona en Argentina

Arjona deleitó a sus fans en la Bombonera

El cantante guatemalteco presentó anoche su último trabajo ante una multitudinaria concurrencia. De esta forma, dio comienzo al segundo de sus cuatro shows en Buenos Aires.
El recital duró dos intensas horas donde el artista realizó un repaso por sus clásicos y sus nuevos temas.

Después de haber batido récords hace unos años con sus 34 funciones en el Luna Park, Ricardo Arjona arrrancó ayer a las 21.50 en un asombroso ciclo: cuatro Bomboneras, en el marco de su gira "5to. Piso".

Hasta La Boca llegaron miles de mujeres, solas y acompañadas por resignados novios y maridos, para aullar por el guatemalteco. Y él no las defraudó. Entre los famosos no faltaron Martín Palermo, Nazarena Vélez y Carlos Nair Menem.

Arjona llenó la Bombonera con un despliegue visual alusivo al título del nuevo disco: la escenografía simula una barriada humilde, con su bar de copas, su barbería, su buzón, sus semáforos, antenas de TV, frentes de autos. Y una pantalla que muestra el edificio con el tan mentado quinto piso que alguna vez habitó Arjona en Madrid.

Acompañado por una banda potente de nueve músicos, durante las dos horas del show el guatemalteco desplegó todo su carisma, siempre acompañado por un coro de gritos femeninos.

Como suele ocurrir cuando se presenta un disco nuevo, la lista de temas combinó canciones de ese trabajo y clásicos: algunos de los títulos fueron "Quinto piso", "Acompáñame a estar solo", "Historia de taxi", "Cómo duele", "Si el norte fuera el sur", "El problema", "Sin daños a terceros", "Pingüinos en la cama", "Mujeres" y, obviamente, "Te conozco" y "Señora de las cuatro décadas".

Un punto alto del show fueron los videos que acompañaron a la mayoría de los temas, incluyendo uno del grupo islandés Sigur Ros para "Que nadie vea".

Como es su costumbre, durante todo el recital Arjona mantiene diálogos con su público; habló de temas variados: desde fútbol y política internacional hasta Mercedes Sosa.

En el momento esperado de la noche cumple otra de sus tradiciones y, en "Señora de las cuatro décadas", invita a una cuarentañera a subir al escenario y quedarse con él durante toda la canción.